Cinco minutos de crisis.
O quizá fueron diez.
Una canción, ni siquiera la que yo pensaba.
Un video, que he reproducido mil veces.
Una llamada que no se hizo.
Un montón de palabras que no oyó quien tenía que oír.
Serán sumadas a la lista de cosas que un día tendré que contar.
Un monólogo, y diez minutos de crisis.
Mi cuarto de pronto era demasiado grande.
Y, sin embargo, estabas más cerca que nunca.
O quizá fueron diez.
Una canción, ni siquiera la que yo pensaba.
Un video, que he reproducido mil veces.
Una llamada que no se hizo.
Un montón de palabras que no oyó quien tenía que oír.
Serán sumadas a la lista de cosas que un día tendré que contar.
Un monólogo, y diez minutos de crisis.
Mi cuarto de pronto era demasiado grande.
Y, sin embargo, estabas más cerca que nunca.